LO ÚLTIMO DE: Christina Dodd

BECAUSE I'M WATCHING: Virtue Falls #5

Lo último de Christina Dodd

Lee un fragmento de su nueva novela

SINOPSIS

El 6 de septiembre, desde New York Times autor de éxito, Christina Dodd,
viene el más nuevo virtud Falls película de suspenso,
Porque estoy mirando! 
Veterano Jacob Denisov vive solo en su pequeña casa, a oscuras, sin dormir, morir de hambre, culpándose por los horrores del pasado y esperando el momento en que se reúne el valor suficiente para suicidarse.Cuando vecino Madeline Hewitson conduce su coche a través de la pared frontal de su casa, ella rompe su casa-y abierto ancho de la vida de Jacob. Ella no se llama "Maddie Mad" para nada. El sobreviviente de una matanza de residencia de la universidad, una mujer acusada del asesinato de su amante, que es perseguido por los fantasmas y atormentado por un asesino que sólo ella puede ver. Se trata de la construcción y obligado a ver el mundo fuera de su casa, Jacob relojes Maddie, reconoce un alma gemela y se pregunta-es esto realmente una locura, o ha alguien le atrapado en un laberinto trenzado de la venganza y la compasión, la culpa y la redención, el asesinato y la locura ?

Extracto

Hoy

La virtud Falls, Washington

Jacob Denisov se sentó en su silla en posición vertical en su sala de estar, mirando fijamente en la oscuridad. Si él mantuvo los ojos abiertos y se quedó con precisión la concentración correcta, sin movimiento o pensamiento, el dolor no se rompió a través. Se tomó el trabajo, pero desde hace meses, que había practicado, y que había conseguido bastante buena.

No hay dolor, roza en su cráneo, tratando de salir, a punto de estallar, a manifestarse en gritos salvajes y violencia que nunca se detiene hasta que se rompió todo ... sobre todo a sí mismo ...

Sin Corea del Norte. No se registraron muertes. Sin culpa. El mundo más allá de la oscuridad no existía. Flotaba en la eternidad sombrío y sólo el hedor de la culpa se demoró, incesante ...

Nunca supo cuando salió el sol ni engarzar; sin luz filtrada a través de las cortinas opacas en las ventanas. No había comido desde ... no recordaba. Ayer en algún momento. Él debe ir a la cocina y conseguir algo de la nevera. Un pedazo de pizza. Un sándwich. Lo que él tenía allí.

¿Cuánto tiempo había pasado desde que había tenido una entrega de comestibles?

Él buscó a tientas la lámpara de la mesa final, encontró el interruptor y la encendió. Incluso la cantidad lamentable de la luz de la bombilla de veinticinco vatios producido le hizo parpadear. Cuando su visión se aclaró, miraba las marcas que había rayado en la pared.

Cinco días ya que el chico sonó el timbre de la puerta, tomó el cheque Jacob pegado en la ventana, ya la izquierda dos bolsas de supermercado de sopa enlatada, comida preparada, y la leche.

Eso significaba que cada trozo de comida en esta casa estaba duro o en descomposición, o necesita un abridor de latas, una sartén limpia, y la voluntad y energía para prepararlo para el consumo.

Sólo dos días más hasta que recibió las tiendas de comestibles de nuevo.

Se apagó la luz.

Podía esperar.

En el campamento, que había aprendido a esperar el momento correcto. Había aprendido ... Se abrió la columna vertebral con fuerza contra la silla, se preparó para la oleada de dolor-

Y con un alto chirrido de madera dentada contra la pintura y el metal, un gris Subaru Forester disparó las medidas concretas de su porche y explotó a través de la pared de su casa, ruedas delanteras en el aire, se dirigieron a la derecha de las estrellas.

Jacob parpadeó contra el asalto de sol mientras a su alrededor la casa se desintegró. vidrio frágil dejó escapar de las viejas ventanas de un solo colgados.Torno y yeso de las paredes y abatidas en una, asfixiante polvo seco. aislamiento de lana de roca cayó de las rupturas que sobresalen en el techo.

La parte frontal de la pequeña SUV golpeó con fuerza hacia abajo sobre el piso de madera,
comió el viejo televisor, el soporte de madera decrépita, y la mesa de centro baja.Con el rugido de un motor acelerado en marcha, por fin, la muerte había llegado para él.

Sobre maldito tiempo.

Se sentó inmóvil, esperando a ser borrado.

A continuación, encaje, boom! El neumático delantero izquierdo desde el pequeño SUV se rompió a través del piso de madera. Con un chillido, el vehículo se detuvo bruscamente ... tres pies de sus rodillas.

Dijo que las primeras palabras que le había dicho unrehearsed en tres meses - "Oh, vamos!" El coche no podría haber impulsado otros seis pies y lo aplanado?

El motor más lento y ocioso, y murió.

Un silencio cayó sobre los restos surrealista de su casa.

El coche estaba sentado inclinado hacia delante y hacia un lado, con el lado izquierdo del parachoques que descansa sobre la vieja alfombra trenzada. A, espárrago astillada pintada desde el porche perforó el capó. El parabrisas estaba cubierto de fragmentos de madera y polvo, pero sin romper. Una bolsa de aire blanco llenó el lado del conductor del coche ... se desinfla lentamente, revelando una mujer de unos veinte años, con los ojos abiertos y agarrando el volante.