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viernes, 22 de enero de 2021

Los Bridgerton: Diferencias entre el libro y la serie de TV.


La reciente adaptación del libro ‘El duque y yo‘ de Julia Quinn a la serie de televisión ‘Los Bridgerton‘ está trayendo mucho de qué hablar.

Los Bridgerton está ambientada en el mundo competitivo de la alta sociedad de Regency London. La ficción empieza con Daphne debutando con gran éxito en el mercado conyugal de Londres, la aparición de una nota de chismes firmada por lady Whistledown y el inesperado regreso de Simon, el nuevo duque de Hastings. La historia gira principalmente alrededor de la historia de Daphne y Simon, quienes fingen un romance para alejar a las mujeres del duque que no quiere casarse ni tener hijos. Sin embargo, los sentimientos afloran y terminan enamorándose.

Este drama de la aclamada Shonda Rhimes (Anatomía de Grey) abarca solamente el primer libro de la saga. En la serie, encontramos demasiadas diferencias respecto al libro, aunque la trama central es idéntica.

Algunas de estas diferencias son:

Cómo se conocieron Daphne y Simon

Si bien la pareja fue reunida inadvertidamente por Nigel Berbrooke tanto en el libro como en la serie, los eventos de su primer encuentro fueron ligeramente diferentes entre sí. En el episodio 1 de “Diamond of the First Water”, Daphne choca accidentalmente con Simon después de intentar escapar de los avances de Berbrooke; mientras que en “The Duke and I”, Simon se esconde y escucha a escondidas a Daphne mientras ella rechaza a Berbrooke. Acude en su ayuda después de que ella golpea a Berbrooke cuando este último se vuelve demasiado agresivo.

En los libros, el duque de Hastings no boxea.


La personalidad del duque de Hastings es diferente. Al no aparecer su tartamudez, que fue lo que le marcó desde pequeño y es fundamental para la trama del libro.

Anthony no es tan protector.

Y mucho menos llega hasta el punto de ser grosero y autoritario como en la serie.

Una importante escena de sexo es ligeramente diferente en el libro.

Después que Daphne se dio cuenta que Simon practicó el método de abstinencia para evitar el embarazo y la engañó sobre por qué no podía tener hijos, tanto en el libro como en la serie, una Daphne despreciada tiene relaciones sexuales con él después, pero se asegura de que no pueda salir. En “The Duke and I”, Simon está borracho y dormido durante esta escena. Después de una pelea con Daphne, va a un bar y regresa ebrio.

El destino de Marina Thompson es muy diferente en los libros

En la serie, Marina también podría ser un personaje completamente diferente, ya que es prima de los Featheringtons y tiene una historia completamente nueva.

El orden de los acontecimientos es diferente.

La serie introduce nuevos personajes.

- Siena Russo. Amante y amor secreto de Anthony en la serie. Sin embargo en el libro se presenta a una mujer llamada Maria Rosso. Una soprano popular, que actúa en una de las fiestas de Violet. También es su ex amante, pero solo aparece en unas pocas páginas, existiendo principalmente para despertar los celos en la futura esposa de Anthony, Kate.

- Reina Charlotte. La magnética Reina Charlotte (Golda Rosheuvel) no existía en los libros de ninguna manera.

- La modista Genevieve Delacroix. Es una nueva incorporación a la serie. En los libros la única amante del segundo Bridgerton era Sophie Beckett, y ella era sirvienta y doncella.

- Príncipe Friederich. No hay un príncipe guapo que haga perder la cabeza a Daphne en “El duque y yo”.

- Sr. Granville. El artista de la alta sociedad y el conocido de Benedict no está en los libros.

- Lord Featherington. El patriarca del colorido clan Featherington rara vez se menciona en las novelas.


Podemos entender estos cambios si tenemos en cuenta que las adaptaciones necesitan desbancarse del libro para crear un producto nuevo con un lenguaje, un ritmo y un espacio propio. Teniendo esto en cuenta, debemos decir que la serie logra desbancarse favorablemente de la serie, aunque, según mi opinión, la adaptación deja en el tintero escenas que en el libro te enamoran, y dan protagonismo a otras historias segundarias que en el libro apenas se mencionan.

Otro de los puntos importantes es que a pesar de las 300 páginas de libro se ha creado ocho capítulos se han centrado en desarrollar al resto de personajes y dándoles mucho protagonismo. En el libro salen pero son como un suspiro. Algunos de los personajes que están cobrando protagonismo son: las hermanas de Daphe, su madre y los aristócratas de la población londinense de la época.

En la serie también se ha priorizado la inclusión social que descuadra un poco, no creemos que sea relevante el color de la piel para la actuación de unas personas pero, si tenemos en cuenta la época (finales del siglo XIX) y dónde se desarrolla (Londres), queda desencajada.

Algo que en la serie resplandece, es la puesta en escena y los vestuarios. Se nota el cuidado de cada detalle, lo que hace disfrutar a las amantes de ese género.

Tanto la serie como la novela son recomendables, aunque para algunos puede quedar algo sosa la adaptación al no haber sea chispa irónica que Julia Quinn tan bien expone.

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